CRÓNICAS PRETÉRITAS Por Donacio Cejas Padrón FIESTA DE LA CANDELARIA EN FRONTERA FIESTA DE LA CANDELARIA EN PUERTO ORDAZ VENEZUELA Con las limitaciones impuestas por las circunstancias sanitarias, se celebró en la tarde de ayer, La Santa Misa en honor de nuestra Patrona La Virgen de Candelaria, el templo acogió a bastantes fieles, que seguidores de las tradiciones centenarias quisieron celebrar de la única manera posible La Fiesta del dos de febrero, como lo han hecho siempre los vecinos de Frontera. La tan nombrada Pandemia, ha trastocado usos y costumbres en todo el universo, ha impuesto un nuevo estilo de vida, tanto en el orden social como económico y laboral, a la vez que ha producido el fallecimiento de muchísimos habitantes del planeta. Ahora parece que se vislumbra en el horizonte una disminución de los efectos tan dolorosos que esta situación ha producido, Dios quiera que así sea. Por eso es que en nuestro pueblo, como en todos sitios, las fiestas han tenido que limitarse a lo más mínimo, en este caso La Santa Misa, sin procesiones, sin bailarines etc. Recordaré brevemente algunas particularidades de La Fiesta de Candelaria del dos de febrero en épocas pasadas. Era la primera fiesta del año en Frontera, y por el régimen de mudadas de una parte de los vecinos de los pueblos altos de la isla, para esa fecha estaban aquí buena parte de los habitantes de San Andrés, Isora, Guarazoca y Erese, y también algunos de Las Casas y Tiñor, que acudían a Frontera fundamentalmente para cavar y podar las viñas, con lo cual el Valle estaba repleto de vecinos, que se hacían presentes en La Fiesta de Candelaria, tanto en los actos religiosos, como en los bailes en los casino de Belgara y Tigaday, y también en La Fiesta de Los Llanillos que desde los años cuarenta del siglo pasado se ha venido celebrando el primer domingo de febrero, en el cual se trasladaba la sagrada imagen desde El Templo hasta el pueblo de Los Llanillos, en una procesión muy concurrida, había Misa en La Plaza del pueblo, procesión por los sitios de costumbre, y después comida de hermandad y regreso en la tarde hasta Frontera, y por la noche baile en los Casinos. Esperemos que ya el próximo año pueda reanudarse esta querida tradición de nuestro pueblo. Me han llegado noticias de La Fiesta de Candelaria en la ciudad de Puerto Ordaz, en Venezuela, donde los canarios residentes allí, en los años setenta del pasado siglo llevamos una réplica de La Patrona de Canarias, y que actualmente se venera en La Parroquia de Fátima del Centro Cívico, pues lamentablemente la hermosa sede de La Asociación Canario-Venezolana de Guayana que con tanto esfuerzo e ilusión levantamos allí, dotada además con una hermosa capilla, donde se entronizó la sagrada imagen cuando llegó desde Canarias, fue invadida, y hubo de rescatarse los elementos de valor y la misma imagen, para ser reubicada en la principal Iglesia de la ciudad, La Parroquia de Fátima, pero los pocos canarios que quedan residiendo allí, acuden a misa dominical a ese templo, y en los días dos de febrero y quince de agosto celebran su fiesta con toda devoción y cariño hacia su Patrona. Venezuela ha sufrido en los últimos tiempos una transformación inesperada y dolorosa para sus habitantes tanto venezolanos como extranjeros que vivían allí con toda tranquilidad y sosiego, formando todos ellos una comunidad en concordia y armonía, que consideraban que vivir allí era casi un privilegio, por las inmensas posibilidades de prosperidad que el país ofrecía en todos sus aspectos al mismo tiempo que recibía generosamente a todos los emigrantes que como yo mismo llegamos a sus costas en busca de un futuro mejor. Recuerdo en particular el cariño con que los venezolanos nos recibían y nos aceptaban, y como acudían a los centros sociales en Puerto Ordaz, fundados por las colonias extranjeras como La Hermandad Gallega, El Centro Español del Caroni, La Asociación Canaria, El Centro Portugues, El Centro Italo-Venezolano , y disfrutaban con la integración de todos nosotros extranjeros de origen. Las Autoridades nos facilitaban todos los permisos necesarios para el funcionamiento sin restricción alguna de nuestros centros, y aceptaban invariablemente las invitaciones que les hacíamos cuando había actos relevantes en los mismos. Muchas calles de la ciudad llevan nombres de España, incluso de Tenerife, y entonces era frecuente que bastantes estudiantes universitarios vinieran a formarse en universidades españolas, algunos en La Universidad de La Laguna en tiempos en que dos canarios fueron embajadores de España en Caracas D. Matías Vega Guerra y el Dr. Alberto de Armas uno natural de Gran Canaria y el otro lagunero. Además muchos profesores e instructores del Ince fueron llevados por el gobierno venezolano para que formaran a estudiantes de distintos oficios, y muchos de ellos se quedaron allí trabajando en las grandes empresas de Guayana, allí se casaron sus hijos y entraron a formar parte de la sociedad criolla con toda satisfacción. Pero hoy las cosas son muy distintas, millones de venezolanos han abandonado su patria convirtiéndose en emigrantes por diversos países, las colonias de extranjeros en su mayoría regresamos a nuestras patrias de origen, y se ha alimentado un sentimiento antiespañol en las nuevas generaciones que ya no se hace agradable vivir allí. Dios quiera que Venezuela retome el camino del que nunca ha debido desviarse, y que los venezolanos vuelvan a sentir la alegría de vivir en una sociedad en paz y armonía.
radiogaroecadenase
Comments